El IIAP, reconocido como Centro de Investigación del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTeI) mediante la Resolución No. 1598 de 2021, cuenta con cinco grupos de investigación, cuatro de ellos categorizados en A, B y C, y uno reconocido por MinCiencias. Estos grupos están conformados por 43 investigadores avalados, entre los cuales se encuentran investigadores Junior (16), estudiantes de maestría o especialización (14), un estudiante de doctorado, profesionales con pregrado (5), con especialización (4) y otros integrantes vinculados (3). La entidad articula sus acciones a través de distintas dependencias, destacándose la Subdirección Administrativa y Financiera, encargada de los procesos administrativos y financieros del Plan Operativo Anual, y la Subdirección de Investigaciones, responsable de la ejecución técnica y de investigación del mismo. El quehacer investigativo se estructura en cinco componentes: el Componente Ecosistémico, que aborda la diversidad de fauna y flora en distintos ecosistemas; el Componente Ambiental, enfocado en la evaluación de la calidad fisicoquímica y ecológica del agua en ecosistemas lóticos y lénticos; el Componente Productivo, orientado al conocimiento agroalimentario y productivo de las comunidades étnicas; el Componente Sociocultural, que analiza las relaciones entre las comunidades, la biodiversidad y su entorno cultural; y el Laboratorio de Datos, que apoya la generación de indicadores ambientales y la planificación territorial mediante modelación espacio-temporal. Estos componentes, de forma integrada, fortalecen la formulación de proyectos institucionales y la construcción de instrumentos de planificación ambiental para el Chocó Biogeográfico.
El Plan Estratégico de Desarrollo Institucional (2016–2026) del IIAP constituye una hoja de ruta orientada al mejoramiento continuo de los procesos administrativos mediante la implementación de 6 políticas y 18 estrategias que garantizan la objetividad, la protección de los bienes institucionales y la eficiencia operativa. Este instrumento estratégico busca consolidar la capacidad institucional a nivel regional, promoviendo procesos participativos para la generación, uso, transmisión y socialización del conocimiento científico y tradicional. Estas acciones están dirigidas a la conservación y fortalecimiento de los sistemas naturales y culturales del Chocó Biogeográfico, así como al mejoramiento del bienestar de sus poblaciones. En esencia, el plan representa una apuesta institucional que asegura la inclusión de actores comunitarios comprometidos con los propósitos fundacionales del IIAP, fortaleciendo su papel como referente regional en investigación y gestión ambiental.
El Plan Estratégico Nacional de Investigación Ambiental (PENIA) es un instrumento de planificación a nivel nacional que articula a los institutos de investigación del Sistema Nacional Ambiental (SINA) y al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (Minambiente), con el propósito de definir áreas prioritarias y temas clave de investigación ambiental alineados con los objetivos e intereses estratégicos del país. Para el periodo 2021–2030, el PENIA establece ocho programas estratégicos que orientan la actividad investigativa en el ámbito ambiental, estructurados en torno a 43 líneas de investigación que reflejan un enfoque integral y continuo. Este plan es el resultado de un trabajo colaborativo entre los institutos del SINA, un equipo técnico del Minambiente y múltiples entidades y expertos del sector ambiental. A través de estos programas y líneas, se trazan directrices generales para la generación, conservación y transferencia del conocimiento científico, con el fin de apoyar la toma de decisiones informadas que promuevan la sostenibilidad ambiental y el bienestar social. Además, busca fortalecer el entendimiento de fenómenos ambientales globales y territoriales mediante la protección de la biodiversidad, el uso sostenible de los recursos, la mejora de la calidad ambiental, la ocupación adecuada del territorio, y la mitigación y adaptación al cambio climático. Su formulación consideró diversos instrumentos de política ambiental del país, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), los aportes de la Misión Internacional de Sabios y la experiencia acumulada de los institutos de investigación. Las temáticas centrales del PENIA abarcan cambio climático y gestión del riesgo; océanos y costas sostenibles; agua, ecosistemas acuáticos y territorio; biodiversidad y sostenibilidad; salud ambiental; construcción de territorios sostenibles; apropiación social del conocimiento; y gestión de la información ambiental.
El Plan Cuatrienal de Investigación Ambiental (PICIA) 2023-2026, titulado “Democratización de la información y el conocimiento como insumos para el tránsito hacia una economía regenerativa, la justicia social y ambiental del territorio del Chocó Biogeográfico”, se desarrolló sobre principios fundamentales que garantizan una gestión basada en reglas que fomentan el respeto y el reconocimiento social. Este plan tiene como objetivo abarcar la totalidad de su jurisdicción (territorialidad), trascender las fronteras nacionales a través de la internacionalización, promover la integración de fuerzas comunitarias, sociales e institucionales (integración), asegurar la revisión pública constante de su ejecución presupuestal y resultados (transparencia), y garantizar la participación de las comunidades asentadas en el territorio (participación).
La generación de información y conocimiento en el marco del PICIA se estructura en seis pilares estratégicos:
Estos principios y pilares orientan la estrategia de investigación científica en el Chocó Biogeográfico, integrando los programas temáticos y líneas de investigación del PICIA 2023-2026. Este enfoque holístico armoniza la ciencia, el conocimiento ancestral, la transferencia tecnológica y la apropiación social del conocimiento, promoviendo su democratización y contribuyendo al fortalecimiento institucional y al diseño de políticas públicas en los ámbitos ambiental, científico y tecnológico.
Para la construcción de un modelo de atención integral del Chocó Biogeográfico, se hizo un proceso de subregionalización que dividió el territorio en 15 subregiones, bajo criterios geográficos y socioambientales que orientan además la forma de aplicación de seis líneas de intervención, las cuales se han denominado: planificación y ordenamiento alrededor del agua, conservación ancestral productiva, producción sostenible, restauración funcional, acción climática y gobernanza para la paz. En la tabla 5 y Figura 11 se muestran el total de subregiones en las que se ha dividido el Chocó Biogeográfico con el fin de facilitar su intervención en lo ambiental, son seis (6) subregiones son netamente continentales, ocho (8) son continentales y marino costeras y una (1) es oceánica a partir de las cuales se definieron 23 metas, 3 orientaciones para la atención en Planificación, Acción climática y Gobernanza, al igual que la formulación de 4 proyectos en Restauración funcional, Conservación, Producción sostenible y Gobernanza.
El Plan Operativo Anual 2025 del IIAP articula 11 proyectos de investigación y 4 actividades instrumentales orientadas a generar conocimiento colaborativo sobre las dinámicas socioculturales, productivas, ambientales y ecosistémicas del Chocó Biogeográfico, con el fin de fortalecer la gobernanza territorial y promover la justicia socioambiental. Este plan busca democratizar la información, fomentar la participación de actores diversos, capacitar y certificar a grupos étnicos, y acompañar técnica y jurídicamente procesos clave del territorio, incluyendo el cumplimiento de sentencias judiciales. Está alineado además, con los programas y líneas del PICIA, el PENIA, el Plan Nacional de Biodiversidad, el modelo de atención ambiental del IIAP y las transformaciones del Plan Nacional de Desarrollo, incluyendo el ordenamiento del territorio alrededor del agua y el reconocimiento de los derechos de los pueblos étnicos, según lo estipulado en la Ley 70 y el Decreto 2164 de 1995.
El IIAP, a través de su componente sociocultural, el IIAP ha llevado a cabo una labor monumental, implementando en los últimos 18 años más de 150 proyectos que han fortalecido las comunidades locales, preservado el conocimiento ancestral y promovido la sostenibilidad ambiental.
El Programa de investigación conocimiento ancestral, etnicidad, cultura y desarrollo propio en el Chocó Biogeográfico desarrollado entre 2007-2018 ha sido fundamental en estos esfuerzos. Este programa ha avanzado significativamente en la generación de información y conocimiento que permite la incorporación de la dimensión cultural en los planes de desarrollo como una verdadera alternativa de generación de desarrollo humano y de ingresos. Las investigaciones han caracterizado costumbres y tradiciones culturales de pueblos y etnias, en aspectos como música, medicina tradicional, etnoeducación, protección y salvaguarda de la identidad cultural, y validación del conocimiento ancestral.
En el campo de la medicina tradicional, el IIAP ha documentado el uso de más de 500 plantas medicinales y más de 70 tratamientos médicos tradicionales usados por comunidades negras e indígenas del Chocó Biogeográfico. Estas prácticas son recursos valiosos que las comunidades utilizan como la primera y a menudo la única opción para atender enfermedades y restablecer la salud. La documentación y sistematización de estas prácticas han permitido conocer la efectividad de fórmulas y dosificaciones tradicionales, así como el análisis químico de algunas plantas utilizadas en estos tratamientos. Esto ha llevado a la caracterización de tratamientos médicos tradicionales para la cura y alivio de una amplia variedad de enfermedades y afecciones prevalentes en el Chocó Biogeográfico. Entre los tratamientos documentados se incluyen remedios para la mordedura de serpientes, gastritis, hipertensión arterial, diabetes, asma, artritis, reumatismo, tifo, malaria, impotencia sexual, infertilidad femenina, entre otros, fortaleciendo los vínculos entre las prácticas médicas tradicionales y las prácticas médicas occidentales. Este esfuerzo no solo ha permitido preservar un conocimiento invaluable, sino que también ha abierto nuevas posibilidades para integrar estos tratamientos en prácticas médicas
En el ámbito de la etnoeducación, el IIAP ha realizado estudios sobre la aplicación de la Cátedra de Estudios Afrocolombianos en el Municipio de Quibdó, evaluado el quehacer etnoeducativo en instituciones clave como las Normales y la Universidad Tecnológica del Chocó, destacando la importancia de incluir la cultura propia de las comunidades negras en los procesos curriculares. Este enfoque no solo fortalece la identidad cultural, sino que también promueve una educación más inclusiva y relevante para las comunidades locales.
Las prácticas tradicionales también han sido un foco importante de las investigaciones del Componente Sociocultural del IIAP. Se han identificado bancos de producción y validación del conocimiento ancestral en la recolección de la almeja arenera en los municipios de Guapi y Timbiquí, Cauca. Esta especie, de gran importancia alimentaria, económica y ecológica, se encuentra amenazada por presiones antrópicas, y los esfuerzos del IIAP han sido cruciales para su conservación. Además, se han implementado proyectos que describen y analizan los sistemas productivos de caza y pesca en el Chocó Biogeográfico, resaltando el bajo impacto de las herramientas tradicionales utilizadas por las comunidades en comparación con las técnicas modernas.
El impacto del componente sociocultural del IIAP también se extiende a la mejora de la gobernanza y la participación comunitaria. La capacitación y el empoderamiento han permitido a las comunidades locales tomar un papel más activo en la toma de decisiones, reduciendo significativamente los conflictos socioambientales. En lugares como Riosucio y Bellavista, la implementación de acciones derivadas de la sentencia T-622 de 2016 ha traído mejoras tangibles en los servicios básicos y la calidad de vida, subrayando cómo la intervención informada y sensible puede resultar en cambios sustanciales y duraderos.
Para el periodo 2019-2023, el Programa conocimiento ancestral, etnicidad, cultura y desarrollo propio en el Chocó Biogeográfico continuó esta labor con un enfoque en la recuperación, documentación, revaloración y protección del conocimiento tradicional. En sus diferentes líneas de investigación ha apostado por la incorporación de estos conocimientos en la gestión de instituciones y en propuestas de conservación y uso de la biodiversidad, ordenación del territorio y gestión del riesgo. Los conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas y negros del Chocó Biogeográfico han sido cruciales para la comprensión y resolución de problemas sociales y ambientales en sus territorios, y el IIAP ha trabajado para asegurar que estos conocimientos sean reconocidos y valorados adecuadamente.
Para el periodo 2024-2027, el Programa de investigación “Dinámicas Sociales e Institucionales Asociadas a la Sostenibilidad Ambiental del Territorio y la Gobernanza para la Paz Total”, busca caracterizar las dinámicas sociales e institucionales que hacen posible la gobernanza dirigida a garantizar el manejo sostenible del territorio. Este programa se enfocará en la tenencia de la tierra, formas de organización, conflictos territoriales y socioambientales, y estrategias de conservación biocultural del territorio. Estas líneas de investigación permitirán avanzar hacia el desarrollo de modelos de gobernanza sostenible que incorporen la participación de la comunidad y los sectores productivos en la toma de decisiones.
El componente ambiental se encarga de producir información y conocimiento sobre la calidad integral, uso, demanda y dinámicas ecológicas de los componente fisicos del ambiente (suelo y agua) haciendo especial enfasis en los sistemas hídricos de la región del Chocó Biogeográfico, buscando generar insumos que permitan optimizar los procesos de gestión, uso sostenible e identificación de estrategias de atención a problemáticas derivadas de disturbios en los sistemas acuáticos y edáficos, a partir de ejercicios de investigación participativa en esquemas de monitoreo con cooperación comunitaria, innovación tecnológica y apropiación del conocimiento. Las temáticas abordadas tienen un enfoque holístico del estudio de los componentes ambientales y responde a las necesidades de información en el territorio para identificar nuevas determinantes de ordenamiento ambiental y promover la transformación de los sectores productivos de manera sostenible, contemplando la gobernanza eficiente, la preservación de la biodiversidad, la conservación de los recursos naturales, los procesos de restauración de ecosistemas, la adaptación y mitigación al cambio climático.
Desde esta perspectiva se busca entender la relación de los componentes ambientales agua y suelo con la realidad sociocultural, la diversidad biológica, los sistemas productivos y la ocupación territorial, como elementos claves para el ordenamiento territorial a partir del análisis del ciclo del agua, el cual integra no solo el recurso hídrico sino todos los componente de los sistemas socioecológicos que describen la interacción entre los aspectos socioculturales y elementos del ambiente, siendo el agua y el suelo los ejes centrales tanto de las dinámicas ambientales como de los procesos productivos que soportan la economía de la región.
De acuerdo a ello, el componente ambiental del IIAP durante los últimos años se ha enfocado en tres líneas específicas de investigación, las cuales están relacionadas con la ecología de los sistemas hídricos para su ordenamiento y manejo integral y los esstudios de calidad y contaminación del recurso hídrico como herramienta de control y mitigación de impactos ambientales. En este contexto y como producto del ejercicio de invetigación se han caracterizado y monitoreado la calidad fisicoquímica y ecológica en más de 60 cuerpos de agua a lo largo de un gradiente altitudinal que abarca desde ecosistemas hídricos de alta y media montaña hasta humedales de tierras bajas, ríos o quebradas rurales y urbanos y aguas costeras. Como resultado de ello se ha generado un balance del estado del recurso hídrico en la región, el cual muestra la existencia de un patrón de comportamiento de la calidad del agua que está influenciado por el nivel poblacional y una combinación de elementos que incluyen el tipo de prácticas productivas desarrolladas, el estado de los sistemas de saneamiento básico y las formas ocupación del territorio. Lo anterior ha permitido concluir que la mayor parte de las cuencas que integran la macrocuenca del pacífico no cuentan con suficientes instrumentos de planificación, cuya implementación pudiese, a través de modelos de gobernanza altamente participativos, garantizar su ordenamiento alrededor del ciclo del agua, lo que se traduce, en falta de agua potable, debido a que motores asociados a actividades productivas y saneamiento básico deterioran su calidad y convierten varias zonas de la región en territorios críticos por la carencia, exceso o por el registro índices de mala calidad del agua.
De manera específica la línea de ecología de los sistemas hídricos, que aborda el componente se basa en la gran oferta de recurso hídrico de la región, alrededor de la cual se establecen complejas dinámicas ecosistémicas, socioculturales y productivas que modelan el estado, la disponibilidad y la calidad del agua, enfocandose en la generación de información sobre el estado del recurso desde una evaluación integral que permita determinar la oferta y la calidad del agua para diferentes usos que abarcan el consumo humano, el establecimiento de la vida acuática, el aprovechamiento productivo, la conectividad ecosistémica y la posibilidad de ofertar bienes y servicios a las comunidades. Lo anterior a partir del uso de variables e indicadores fisicoquímicos, grupos biológicos asociados, aspectos ambientales y elementos socioeconómicos y culturales del territorio caracterizados y monitoreados con participación comunitaria. En este sentido, la información generada constituye la base para la gobernanza del agua, el ordenamiento territorial hacia la transformación de los sistemas productivos y la resolución de conflictos socioambientales con enfoque participativo, para lograr una gestión sostenible de los socio ecosistemas hídricos del territorio.
De otro lado la línea de Estudios de calidad y contaminación del recurso hídrico como herramienta de control y mitigación de impactos ambientales, se concentra en caracterizar y monitorear procesos específicos de contaminación presentes en los sistemas hídricos continentales y costeros de la región, a partir de la medición y análisis de variables e indicadores que den cuenta de su estado de calidad como respuesta al establecimiento de sistemas productivos, actividad urbana y vertimiento de sustancias altamente contaminantes entre otros aspectos que afectan tanto la cantidad como la calidad del agua dispuesta para los distintos usos en el territorio. El análisis planteado, se basa en la identificación de las variables asociadas a los procesos de contaminación, la caracterización y monitoreo de las mismas desde la perspectiva del entendimiento de la relación entre las dinámicas de uso que las generan y sus efectos en la calidad integral del agua, cuyos resultados permiten generar un diagnóstico de los impactos asociados a este tipo de contaminantes y son la base para toma de decisiones de ordenamiento productivo, diseño de herramientas tecnológicas para su remoción, gestión ambiental de fuentes hídricas urbanas y mejoramiento de procesos productivos con vertimiento de sustancias contaminantes entre otros que redunden en la reducción de los impactos asociados y en la promoción de ciudades más sostenibles.
En proyección se pretende complementar la información con el análisis de la relación del suelo con la diversidad biológica, productividad territorial y la ocupación, buscando evaluar el proceso de formación de los suelos de la región, su caracterización física y biológica, el monitoreo de la biodiversidad edáfica con relación a la productividad, la comprensión de los roles fundamentales de los organismos del suelo en la mediación de los servicios que este presta y la relación que tiene este recurso con las actividades productivas de la región. Con lo anterior se pretende generar insumos para acabar con las brechas en el conocimiento, la democratización de la información y para la toma de decisiones respecto a su uso en la economía regenerativa e influir en la mitigación de los efectos del cambio climático, garantizando, el mantenimiento de la biodiversidad edáfica y los servicios de este ecosistema.
El componente productivo adelanta el ejercicio de la investigación en consideración del enfoque Acción – Participación, que, a la vez de generar información y conocimiento científico, aporta al fortalecimiento de los modelos productivos tradicionales y procura dar respuestas a las inmensas necesidades agroalimentarias que los pueblos negros e indígenas nativos del Chocó Biogeográfico han padecido históricamente dadas las inequidades sociales que se vive en toda esta importante ecorregión.
Tiene como fin, generar conocimiento técnico-científico, a partir de procesos de investigación en los cuales las comunidades participen como sujeto y objeto, en aras de contribuir a la apropiación territorial y al mejoramiento de la calidad de vida en la población del Pacífico colombiano, desde las siguientes prioridades: la consolidación de la autonomía alimentaria, a partir del fortalecimiento de las unidades productivas familiares y comunitarias en el ámbito rural y urbano; el fortalecimiento de las dinámicas económicas, a través de la identificación, implementación y promoción de iniciativas de emprendimiento, tomando como base la oferta ambiental de la ecorregión Chocó Biogeográfico colombiano; la promoción del desarrollo tecnológico, que respalden la política nacional de mecanismos de desarrollo limpio (MDL), entre otras prioridades.
De igual manera, aporta y genera alternativas sostenibles agroindustriales y de negocios verdes que se han identificado en los renglones productivos agropecuario, recursos hidrobiológicos y productos no maderables del bosque, base fundamental del sistema económico regional y que en consideración de la gestión ambiental sirven de soporte para la planificación y la toma de decisiones en pro de mejorar las condiciones económicas y sociales de los entornos territoriales, principalmente locales. En consecuencia, genera información pertinente en el marco de proyectos que evalúan modelos productivos sostenibles y aprovechamiento diversificado del bosque, realizando actividades cuyos resultados aportan a mejorar la productividad de especies vegetales y animales silvestres, implementación de emprendimientos verdes y agronegocios, construcción de estrategias sostenibles a través de la investigación desde la conservación, manejo y uso sostenible de los agroecosistemas y en general la biodiversidad presente en la región.
En consideración de lo anterior, como investigaciones emblemáticas del componente se destacan entre otras, el diseño e implementación de un modelo de Jaulas flotantes para la cría y producción de especies icticas nativasen fuentes hídricas como ríos y ciénagas del Chocó Biogeográfico, como alternativa tecnológica frente a las problemáticas de contaminación de dichos cuerpos de agua generados por la minería ilegal y otros motores de perdida de la biodiversidad, crisis alimentaria y conservación de la biodiversidad.
Asi mismo, se destaca el estudio de caso sobre los Sistemas productivos tradicionales y prácticas de manejo ancestral como estrategia de seguridad alimentaria y adaptación al cambio climático en comunidades afrodescendientes de la cuenca media y baja del río Atrato, en donde el aporte fundamental de esta investigación es la generación de información y conocimiento, asi como la contribución reflexiva en donde se valora y relieva un sistema agroproductivo tradicional, resiliente cargado de un gran conocimiento ancestral y ambiental desarrollado como estrategia de sobrevivencia por los pobladores nativos de la cuenca del rio Atrato y en general todo el pacífico colombiano que evidentemente establecen una interacción armónica con la naturaleza y que es el rasgo identitario que distingue a los Chocoanos y afrodescendientes de Colombia y por lo cual dicho sistema hay que conservarlo y protegerlo del avance destructor del modelo económico neoliberal que además viene destruyendo toda la base natural y ecosistemas estratégicos de gran valor ecológico local, nacional y mundial. Contribuye con argumentos y evidencias que el estado colombiano y la cooperación internacional deberán aceptar e incorporar en sus políticas, programas y lineamientos en perspectiva de la planeación del desarrollo socioeconómico y ambiental de esta importante ecorregión de Colombia.
En el marco del PICIA 2023 – 2026, desarrolla el programa 3 asociado con la Evaluación de la introducción de variables tecnológicas y agroecológicas en la consolidación de modelos productivos tradicionales, el cual tiene como propósito aportar información y conocimiento que permitan transitar del paradigma económico extractivista, no alineado con la oferta agroambiental y cultural del territorio, hacia un modelo económico orientado a la vida. Para ello, se busca implementar procesos participativos previamente validados, de bajo impacto, que fortalezcan la situación actual de los sectores productivos mediante la incorporación de nuevas tecnologías e innovación. Esto permitirá alcanzar una mayor productividad, promoviendo a futuro una economía responsable y regenerativa. La implementación de este programa contribuirá a la construcción de un futuro favorable al clima, en el que las personas y la naturaleza puedan coexistir y prosperar. En este sentido, la inclusión en los modelos sostenibles de variedades tradicionales y especies comestibles silvestres, propias de los sistemas alimentarios locales, contribuirá a la diversificación económica y a la promoción de especies vegetales que, en interacción con la fauna local, ofrecen bienes y servicios ecosistémicos y económicos. Esto permitirá consolidar agroecosistemas resilientes al cambio y la variabilidad climática.
Se propone desarrollar estudios que permitan a los sistemas productivos de base comunitaria, ya caracterizados y priorizados, avanzar mediante el fortalecimiento tecnológico y la aplicación de lineamientos agroecológicos hacia sistemas sostenibles y resilientes. Estos sistemas deben estar basados en la productividad y producción de dichos modelos, con el objetivo de garantizar la disponibilidad de bienes alimentarios y la conservación de la biodiversidad, el suelo y el agua. Todo ello se realizará mediante estrategias participativas que favorezcan el desarrollo e implementación de sistemas productivos sostenibles e incluyentes, fundamentados en principios de agricultura climáticamente inteligente, como base para el bienestar colectivo, la vida, la paz total, y la gobernabilidad y gobernanza en territorios étnicos del Chocó Biogeográfico.
Adicionalmente, se promueve el desarrollo, en el contexto del Chocó Biogeográfico, de la dimensión real —energética y material— de los flujos que transforma la bioeconomía, así como su integración con los ritmos naturales del territorio. Se busca así generar transformaciones necesarias de las materias primas locales, aportando información y conocimiento para impulsar acciones estructurales que fomenten una economía regenerativa. Esto permitirá a las comunidades aumentar su potencial productivo en armonía con una dinámica agroecológica integral que considere aspectos sociales, ambientales y económicos, teniendo en cuenta la oferta natural del territorio. Finalmente, identificar e incorporar mecanismos de producción limpia, basados en criterios de sostenibilidad ambiental, alineados con el patrimonio natural y cultural del territorio y con las exigencias de la lucha contra el cambio climático. Se busca que los modelos de producción integren perspectivas comunitarias y de conservación ambiental, aportando así a la reconversión de los sistemas productivos, de modo que se vuelvan más competitivos y sostenibles, contribuyendo al mejoramiento de las condiciones de vida de la población regional.
El componente ecosistémico se encarga de generar conocimiento sobre los ecosistemas estratégicos y la biodiversidad del Chocó Biogeográfico. A través del desarrollo de investigaciones de carácter básico y experimental, se ha tratado de comprender no solo el estado de conservación de los ecosistemas, sino su funcionalidad ecológica y su capacidad de sostener la vida de la biota en contextos de alta presión antrópica. El trabajo desarrollado por este componente se fundamenta en la necesidad de interpretar el estado de los ecosistemas como sistemas dinámicos que interactúan a diferentes escalas espaciales y temporales, lo cual requiere enfoques interdisciplinarios y métodos participativos que integren el conocimiento científico con los saberes locales de las comunidades que habitan el territorio.
El componente ha liderado más de 340 investigaciones que junto a otras instituciones se ha contribuido al conocimiento de los ecosistemas y a la identificación las más de 2.900 especies de plantas y 1.590 especies de fauna registradas para la región, incluyendo 1.515 especies de interés especial (migratorias, endémicas o amenazadas de acuerdo con los criterios de la UICN y los listados nacionales). Esta información ha sido esencial para la delimitación de áreas prioritarias para la conservación, el diseño de estrategias de restauración ecológica diferencial y el fortalecimiento de capacidades comunitarias para el monitoreo de la biodiversidad.
Así mismo, los estudios realizados han evidenciado patrones de degradación de importantes áreas vinculadas a actividades extractivas como la minería ilegal, la expansión de monocultivos, la deforestación para ganadería extensiva, los incendios forestales, y la alteración de cuerpos de agua. Estos motores de cambio han intensificado los procesos de fragmentación y pérdida de conectividad ecológica, amenazando la integridad funcional de los ecosistemas y la seguridad ecológica de las comunidades locales. El conocimiento de estos factores causantes de la transformación del uso del suelo, han promovido el diseño y elaboración de herramientas técnicas que contienen lineamientos para la restauración funcional de ambientes perturbados, permitiendo aportar insumos para la generación de instrumentos para el mejoramiento de los servicios ecosistémicos; así como la apropiación social del conocimiento que conlleven a la resiliencia de los ecosistemas.
El trabajo del componente se enmarca en tres líneas de investigación, una de ellas denominada Estado y dinámica de ecosistemas, comunidades, poblaciones y especies de interés especial, dirigida a avanzar en la identificación, priorización, caracterización integral y monitoreo de ecosistemas de interés socio ambiental, como humedales costeros y continentales, bosque húmedo, bosques inundables, bosques secos y ecosistemas de media y alta montaña aún no investigados; así como el conocimiento del estado de conservación, manejo y distribución de comunidades biológicas, poblaciones y especies de interés especial como arracachales, panganales y cativales; todo esto con el fin de incrementar la comprensión de la función, dinámica natural de la región y motores de pérdida que amenazan la estabilidad de estas y sus componentes en el tiempo y el espacio.
La segunda línea se enfoca en el monitoreo comunitario del estado y dinámica de ecosistemas con importancia socioambiental de la región, desde una mirada del conocimiento local y comunitario en sinergia con el conocimiento científico, desde donde evalúa el estado y la dinámica funcional de los ecosistemas y la relación con sus elementos integradores, contribuyendo sustancialmente a determinar la dinámica y funcionalidad de los ecosistemas. y por último, la línea denominada protocolos de restauración funcional hacia una economía regenerativa, genera insumos para elaborando protocolos, lineamientos, planes y estrategias diferenciales que faciliten acciones en territorio para recuperar y hacer funcionales áreas disturbadas por diferentes motores de deforestación; de manera, que se transite de intenciones de restauración meramente ecológica y se pase a una intervención activa del ecosistema perturbado, que simultáneamente favorezca el retorno de algunas funciones y características básicas y genere bienestar comunitario sin renunciar a la posibilidad mantener elementos bióticos claves, que naturalmente habitaron o habitan los sitios en proceso de restauración.
Cabe destacar que estas líneas se articulan con lineamientos de políticas públicas como Política Nacional para la Gestión Integral de la Biodiversidad y sus Servicios Ecosistémicos (PNGIBSE), la Política Nacional de Restauración (PNR), así como el Plan Estratégico Nacional de Investigación Ambiental (PENIA). El componente ecosistémico trabaja articuladamente con los otros componentes y con otras instituciones (Consejos Comunitarios, Resguardos Indígenas, asociaciones locales, instituciones nacionales e internacionales y la academia), este enfoque integral ha contribuido al cumplimiento de nuestras metas establecidas en nuestro Plan institucional cuatrienal de investigación ambiental - PICIA.
Lo anterior busca que información generada en las investigaciones sea incorporada en la planificación territorial y ambiental, aportando datos robustos para el ordenamiento del territorio, la delimitación de áreas prioritarias de conservación, la evaluación de impactos, y la formulación de instrumentos de planificación. Así mismo se busca fortalecer la participación de las comunidades étnicas, la cogestión del conocimiento, promoviendo así la apropiación social del conocimiento y la sostenibilidad a largo plazo y la toma de decisiones interinstitucionales con base en indicadores de funcionalidad ecosistémica, resiliencia ambiental y conectividad ecológica, en coherencia con las políticas nacionales.
El trabajo articulado de los componentes ha permito reconocer y posicionar al IIAP como centro de investigación de referencia nacional e internacional en el análisis funcional de ecosistemas, la restauración funcional con base comunitaria y la integración de conocimientos tradicionales con conocimiento científico, en defensa del patrimonio biocultural del Chocó Biogeográfico.
El Laboratorio de Datos es un área interdisciplinaria e innovadora que en su función de apoyo a la Subdirección de Investigaciones adelanta procesos de gestión, análisis, modelado y visualización de datos ambientales, con el fin de generar insumos estratégicos mediante ciencia de datos, ingeniería y análisis espacial, diseño visual y desarrollo web geográfico, para transformar datos complejos en información accesible, confiable y útil que fortalezcan la toma de decisiones oportunas e informadas a nivel sectorial, especialmente autoridades ambientales, comunidades étnicas, investigadores y otros actores presentes en el Chocó Biogeográfico y con incidencia en materia ambiental a nivel nacional e internacional.
De forma paralela a la custodia, administración y gestión de los datos, se genera información enmarcada en el programa de investigación “Evaluación de la efectividad de medidas de adaptación al cambio climático, reducción del riesgo y emisiones de gases de efecto invernadero”, donde se adelantan ejercicios de análisis a partir de modelaciones espacio temporales de la dinámica territorial, para aportar insumos claves en la construcción de comunidades resilientes y con capacidad de adaptación frente al cambio climático. Lo anterior mediante la aplicación de herramientas de teledetección y Sistemas de Información Geográfica, complementado con estrategias participativas en el proceso de levantamiento de información en campo mediante cartografía social, diálogo de saberes, construcción de líneas de tiempo, entre otras enmarcadas en las ciencias participativas.
En esta perspectiva, a la fecha se han generado insumos que permiten conocer fenómenos asociados a condiciones climáticas extremas como las inundaciones producidas por la combinación de las fuertes luvias y alteraciones en el suelo producto de actividades antrópicas, que hacen que el pulso del agua en la cuenca del río Atrato genere efectos negativos en la zona de llanura aluvial, que es donde se localizan en mayor proporción los asentamientos humanos, así como información de los incendios en su parte baja al norte del Chocó y el noroccidente antioqueño, donde las dinámicas productivas se correlacionan de forma directa con su ocurrencia, y las épocas de sequía agudizan el impacto, y dificultan el control y manejo de las conflagraciones, ocasionando afectaciones en fauna y flora a la fecha en poco más de 50 mil hectáreas de bosque que incluye áreas de protección y conservación ambiental, al igual que de territorios colectivos de comunidades negras e indígenas, mostrando que hay una marcada época de pocas lluvias a finales y comienzo de año en las que aumenta la probabilidad de ocurrencia. Del mismo modo se han generado productos de investigación en los cuales se analizan escenarios probables de riesgos a los que se encuentra expuestos la población y el ambiente en general, tanto el organismo humano, como las funciones de soporte de vida y los ecosistemas por el uso, manipulación o almacenamiento de sustancias químicas en actividades productivas después de un desastre natural súbito o accidentes, permitiendo conocer el nivel de impacto en función del tipo de amenaza, el grado de exposición y la cantidad de sustancia presente.
Esta generación de información y conocimiento se desarrolla en respuesta a las necesidades de información identificadas de manera conjunta con actores claves del sector y las comunidades, que son abordadas desde tres líneas estratégicas: en la primera línea de “Identificación y caracterización integral de zonas de riesgo y vulnerabilidad a eventos climáticos extremos”, se genera conocimiento útil para los procesos de construcción de herramientas para la gestión del riesgo a nivel urbano y rural, basados en el análisis de las variables biofísicas asociadas a la dinámica del territorio, la identificación de los impactos ambientales ocasionados y la consolidación de modelos propios de mitigación y adaptación, los cuales deberán contemplar estrategias para el desarrollo de actividades productivas, para la conservación de la vida, la salud y los recursos naturales, el aprovechamiento y manejo adecuado del recurso hídrico para afrontar sequías e inundaciones, procesos de producción de energía limpia y sustitución de sistemas altamente contaminantes, sistemas alternativos de transporte terrestre y fluvial, gestión ambiental de residuos, entre otras que contribuyan con el propósito de fortalecer la funcionalidad de los ecosistemas con perspectiva regional y aumentar la capacidad adaptativa de las comunidades y la resiliencia de los territorios locales.
Ya en la segunda línea, de “Medidas comunitarias de adaptación al cambio climático y su efectividad para reducir pérdidas de biodiversidad y cultivos”, se adelantan ejercicios encaminados a analizar las formas de relacionamiento de las comunidades con su entorno, mediante lo cual se diseñan e implementan soluciones basadas en la naturaleza que desde el conocimiento tradicional inciden en el estado de la estructura y funcionalidad de los ecosistemas, y se espera poder con esto, definir indicadores ambientales que reflejen las medidas de adaptación climática comunitarias y su efectividad frente a los cambios de uso del territorio y los motores de pérdida de la cobertura vegetal, la fragmentación del paisaje, que permita la toma de decisiones encaminados a definir lineamientos de acceso, uso, control y beneficio de los recursos naturales con enfoque diferencial, para la consolidación de comunidades resilientes frente al cambio climático, con metodologías de acción – participación, que mediante la definición de criterios y la modelación espacial, promuevan la sostenibilidad ambiental.
Por último, en la tercera línea de “Caracterización integral de transformaciones para la mitigación del cambio climático”, se aportan insumos desde la realización de ejercicios que permiten conocer y comprender las estructuras, características, dinámicas, acontecimientos asociados a las transformaciones del territorio para la definición de estrategias de adaptación y mitigación al cambio climático, y que además permita plantear modelos de economía de producción y consumo responsable, ajustados al contexto económico, ambiental o social regional, que podría requerir el uso de sistemas de medición diferentes incluso para actividades en la misma escala y el mismo sector.
John Von Neumann
El Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico brinda apoyo científico, tecnológico y de conocimiento a las comunidades asentadas en el Chocó Biogeográfico, al SINA y MADS.
Cra 7 No 29 - 57 B/César Conto, Quibdó - Chocó